Después de estar media tarde de ayer intentando hacer una reserva para cenar, conseguí mesa en un sitio agradable, con buena música de fondo, servicio agradable y sobre todo comida muy rica...Ahora mis salidas se reducen en el tiempo, pero me lo paso casi igual de bien que cuando me daban las tantas por lo bares de Madrid.
En muy poco tiempo mi vida ha cambiado mucho, pero yo me sigo sintiendo igual, con los mismos gustos y aficiones, pero ahora tengo la estabilidad y el amor que antes me faltaba, ahora soy feliz y difruto con él de momentos que aunque simplemente sencillos se convierten en inolvidables...
La Kitchen
Prim, 5
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